Fuentes de Andalucía
tiene el carnaval más original de la provincia de Sevilla y uno de los más
interesantes desde el punto de vista etnológico de Andalucía. No en vano es el
único, junto con el de Cádiz que cuenta con la declaración de Fiesta de Interés
Turístico de Andalucía.
El antropólogo
norteamericano David Gilmore, fue el primero en realizar un estudio sobre esta particular
celebración. En su obra “The People of
The Plaine”, redactara en Fuentes de Andalucía en los años 1972 y 1973,
luego más tarde en 1977 y 1980; cuenta cómo los señoritos abandonaban el pueblo
al llegar las fechas de Carnaval, quedando las calles céntricas de Fuentes de Andalucía
a merced de las capas menos favorecidas del pueblo. Durante los días que duran
el Carnaval, tanto trabajadores como jornaleros paseaban todo el día por sus calles
entonando canciones alusivas a los acontecimientos más dispares acaecidos durante
el año en Fuentes. En el 1991 volvió
otra vez a Fuentes para escribir “El
carnaval andaluz postfranquista”.
Porque en Fuentes
de Andalucía, desde siempre, las máscaras salieron a la calle para acosar a los
vecinos y no vecinos transeúntes con sus desafíos verbales. La espontaneidad de
sus máscaras daba al pueblo de Fuentes un cierto aire subversivo y disparatado,
que suponía una ruptura con el viejo orden social.
El catedrático de
antropología social de la Universidad de Sevilla, Salvador Rodríguez Becerra,
describe el carnaval de Fuentes de Andalucía en su libro “Los Andaluces”, presentándolo como ejemplo de tradición y
singularidad en Andalucía:
“La fiesta se desarrolla a lo largo de cuatro días, comenzando
el domingo antes de Cuaresma hasta el martes, para terminar el domingo
siguiente, llamado piñata. La participación es mayoritaria por parte de la
clase baja o jornaleros y malletes pobres y va descendiendo hasta la clase alta
o señoritos, que incluso abandonan la localidad durante estos días.
La
principal actividad de la fiesta consiste en el deambular de personas y grupos
por las dos calles principales disfrazados con exóticos vestidos y máscaras,
que generalmente no son sino vestidos viejos procurando mantener oculto el
rostro y abordando a amigos, vecinos y desconocidos. Carece la fiesta de todo
tipo de actos organizados previamente, salvo una banda de música, la murga
compuesta por trabajadores con instrumentos propios y que tocan y cantan de bar
en bar, en una pandilla de la que también forman parte las mujeres”.
Salvador
Rodríguez Becerra también realizó un programa televisivo para Canal Sur, en el
cual exponía el carnaval de Fuentes de Andalucía como referente de la tradición
de los Carnavales en Andalucía.
Este documento
formaba parte de una serie dedicada a “Las Fiestas de Andalucía” y el capítulo
sobre el carnaval fontaniego se titulaba “Las
Máscaras de Fuentes de Andalucía”, que fue emitido por primera vez en 1991.
En Fuentes se
observa la pervivencia de modos ancestrales de la festividad, fieles tanto en
espíritu como en estética a lo que debió ser el Carnaval de hace siglos.
En el 2004, desde
el 30 de agosto al 3 de septiembre, en la Casa Palacio Puerta de Córdoba en
Carmona, sede permanente del Centro Cultural de la Universidad Pablo de Olavide,
acogió los “Cursos de Verano”, que abordo temas tan diversos como la
arqueología, los medios de comunicación, el flamenco y el carnaval: “Carnaval en Andalucía: Historia y Presente”,
donde se incluía una ponencia sobre el Carnaval de Fuentes de Andalucía, a
cargo del ya mencionado antropólogo Salvador Rodríguez Becerra, catedrático de
la Universidad de Sevilla.
El escritor fontaniego
José Moreno Romero también realizó un interesante análisis de nuestro carnaval en
su libro “Fuentes de Andalucía: Crónica
del Siglo XX”. En él se destaca que la tradición del carnaval de Fuentes de
Andalucía es debida, además de a los aspectos anteriores, a su perduración durante
las décadas cuarenta, cincuenta, sesenta y setenta. Esto hizo que el carnaval fuese
reivindicativo y de liberación, olvidando por unos días la represión que se
sufría durante aquella etapa de la historia de España, y cómo el carnaval llegaba
a la democracia de una manera continua, sin interrupciones, sin ninguna influencia
foránea, como ocurriría en los carnavales de los pueblos colindantes, con clara
influencia del carnaval gaditano en los aspectos más destacables de la fiesta.
Una vez llegada
la democracia, los fontaniegos retomamos nuestras festividades carnavalescas de
la forma más tradicional.
Desde la década
de los noventa, Fuentes de Andalucía ha procurado mantener su carnaval típico,
intentando evitar las influencias foráneas, convirtiéndose de esta manera en el
único carnaval de la provincia de Sevilla e incluso de la comunidad andaluza, con
unas características particulares conservadas desde principios del siglo XX y manteniéndolas
a pesar de la censura de la dictadura franquista.
Lo que hace distinto
el carnaval de Fuentes de Andalucía en relación a otros, es entre otras cosas
lo siguiente:
EL
JUEVES LARDERO
Es una fiesta
popular de antiquísima tradición que, en Fuentes de Andalucía, marca el
comienzo del Carnaval.
Consiste, en la realización
por parte de grupos de amigos o familiares, de un almuerzo y de una merienda
campestres, en la Fuente de la Reina y en los Pinos, y actualmente se realiza
en el paraje llamado “Molino Viento”, para comer filetes empanados, “tortilla
de papa”, chorizo asado, de postre un entornao y luego un palmito. Comienza al
mediodía y se extiende hasta bien entrada la noche. Su origen se cree que se
remonta a la Edad Media.
En la actualidad,
el Jueves Lardero sigue manteniendo en Fuentes de Andalucía una tradición muy
fuerte y aún vigente. Grandes y pequeños esperan ansiosos la llegada de este
día que, aunque no sea considerado como fiesta local, los niños no asisten al
colegio; y los mayores se dan un respiro para olvidarse por un día del quehacer
diario, y pasar en compañía de los amigos y familiares un día en el campo.
LAS MÁSCARAS
El diccionario de
la Real Academia de la Lengua Española referente a Máscara dice:
“Figura que representa un rostro humano, de animal o puramente
imaginario, con la que una persona puede cubrirse la cara para no ser
reconocido, tomar el aspecto de otra o practicar ciertas actividades escénicas
o rituales”.
Esta definición
se acerca a las máscaras de Fuentes de Andalucía pero no las identifica
completamente.
En la estética y el comportamiento de las máscaras está una de
las mayores singularidades del carnaval. Muchos de los participantes no llevan
un disfraz concreto, sino de una suma de elementos estrambóticos e inconexos en
los que se incluye una máscara abstracta.
El objetivo es no
ser reconocido por nadie
Las máscaras
fontaniegas incluyen además un tono de voz particular acompañado de gestos
exagerados, la forma de andar y los elementos utilizados para disfrazarse, componen
una estética de aspecto grotesco y deforme, muy original.
El pueblo disfrazado
toma las calles
EL PALMITO
Es la única
palmera nativa de la Europa continental, distribuida por todo el litoral
mediterráneo, se distribuye por las regiones secas a lo largo de la costa
mediterránea, es abundante en las costas mediterráneas de España, sobre todo en
las de Andalucía y del norte de Marruecos. En la provincia de Malaga, crece de
forma natural en su Sierra donde es una
de sus especies más características.
Es una planta
protegida en la provincia de Sevilla.
El corazón o
cogollo de las plantas es tierno y comestible, lo mismo que la espata floral o
jiga o higa cuando es joven, atribuyéndosele en la antigüedad la propiedad de
despertar la virtud genital y ser propia para holgazanes.
LAS MURGAS
La definición que
hace la Real Academia Española de la Lengua de murga nos dice:
“Compañía de músicos malos, que en determinadas fiestas tocan
en las puertas de las casas acomodadas con la esperanza de recibir algún obsequio”.
En Fuentes de
Andalucía la definición de murga que hace esta institución no las identifica.
Las murgas fontaniegas son agrupaciones de amigos que cantan en el carnaval, acompañados
exclusivamente de un bombo y una caja, las diferentes coplas o canciones
satíricas características de dicha fiesta, representando uno de los elementos
más importantes del carnaval por su picaresca y su perduración en el tiempo.
LA CARRERA
El carnaval
fontaniego se identifica con “la Carrera”, que es una calle principal de Fuentes
de Andalucía, donde se llevan a cabo la mayoría de los actos programados para
su celebración y donde las máscaras pasean con sus trapos y su peculiar tono de
voz. Es un escenario al aire libre donde tiene cabida todo el mundo.
EL ENTORNAO
La mayoría de las
fiestas de gran arraigo popular tienen vinculada una gastronomía que se
identifica con ésta y se consume en abundancia durante el desarrollo de la
fiesta.
El carnaval de Fuentes
de Andalucía tiene como dulce típico el “entornao”.
Se trata de un
dulce elaborado a partir de harina, agua, ajonjolí, azúcar, canela y pimiento
molido, dándole este ingrediente un peculiar color anaranjado que lo caracteriza
y lo diferencia de los demás dulces.
Teniendo en
cuenta todos estos datos, hace unos años desde la Asociación Afontur surgió la
iniciativa de solicitar la declaración del Carnaval de Fuentes como “Fiesta de Interés Turístico de Andalucía”
puesto que cumplía claramente los requisitos exigidos por la Administración
Autonómica para este tipo de declaraciones como son, por ejemplo, tener una
antigüedad de al menos 25 años, que su celebración se efectúe periódicamente y
en fechas fácilmente determinables, que posea aspectos originales y de calidad
que la singularice respecto de otras fiestas similares en otras localidades o
que represente una tradición arraigada que determine su estabilidad y la
participación de la población.
Asimismo, para la
solicitud de esta declaración, se contó con el apoyo expreso de personalidades
del mundo académico como los ya mencionados antropólogos, Salvador Rodríguez
Becerra y David D. Gilmore.
La obtención en
el año 2007 de dicha declaración supone el reconocimiento de la importancia de
esta fiesta a nivel andaluz, tanto por su singularidad como por su tradición y
arraigo entre la población local.
Pero por otro
lado debemos tener en cuenta que también representa la adquisición de una serie
de obligaciones como la de realizar su promoción, la conservación de sus
caracteres específicos y tradicionales, el fomento de su calidad o el
incremento de la afluencia turística generada por esta fiesta.
Debemos ser
conscientes de que todos los fontaniegos y fontaniegas somos los responsables
de mantener nuestro carnaval para que siga identificándonos dentro y fuera de nuestra
localidad y que continúe siendo el exponente de una expresión popular que ha
sobrevivido durante más de cien años pese a las adversidades sufridas a lo
largo de su historia.
Fuentes
consultadas:
Un escrito de la
Asociación Afontur, publicado en la revista del carnaval 2008 de Fuentes.
Internet.
